Carlos Giraldo y Carlos Álvarez
Al tiempo que el mundo y la región continúan experimentando los efectos de la pandemia y persiste la incertidumbre sobre su contención, América Latina y el Caribe requieren una red de seguridad financiera robusta que apoye su recuperación sostenida en los próximos años. Para esto es valioso contar con un FLAR de alcance regional como complemento de la acción global del Fondo Monetario Internacional (FMI) y de los otros componentes de la red de seguridad financiera global, especialmente de las reservas internacionales de los bancos centrales.